Orizaba.- El consumo desmedido de combustibles fósiles para la movilidad urbana y la industria, ocasionaron un cambio climático en diversas regiones del mundo, dando como resultado nevadas atípicas e inusuales, incendios desmedidos, inundaciones y deshielo de glaciares.

Los apagones en gran parte de Estados Unidos y Norte de México se originan por la onda gélida que impide un correcto flujo de combustibles que abastecen la producción de la industria energética, y que se mueven principalmente con gas natural y gasolinas, señaló el analista, ingeniero Jorge David Reyes Vera.

Pero también, dijo, porque aumenta el desabasto en algunas regiones que se deben complementar de las zonas donde no se ha agravado el problema, dando como resultado apagones por corte de energía eléctrica en el norte de México, impactado por la tormenta invernal de los Estados Unidos.

Reyes Vera señala que esta situación impacta la economía porque para la industria en general, la aeronáutica, el transporte y los servicios. “Tan solo en Texas se registró la muerte de dos personas, hubo fallas en el servicio de electricidad y agua, afectando a más de cuatro millones de personas.

En México, el número de muertos por la onda gélida en su frontera con Estados Unidos ascendió a ocho, mientras que en la región todavía hay un 20 por ciento de usuarios sin servicio eléctrico y temperaturas de hasta 15 grados bajo cero.

En Atenas, Grecia, una fuerte e inusual nevada cubrió de blanco la Acrópolis y otros monumentos antiguos. Otra inusual nevada se registró en las últimas horas en Jerusalén, tras una tormenta de nieve que comenzó el miércoles por la noche alcanzando los 15 centímetros de altura, obligando al cierre del transporte público.

España alcanzó el pasado mes de enero más de 50 centímetros de nieve en un solo día, el mayor nivel en los últimos 50 años, según la Agencia Estatal de Meteorología, paralizando el tránsito y cobrando la vida de cuatro personas.

“Por todo ello, habría que analizar, que estamos haciendo. Es inusual la caída de nieve en diversas regiones del mundo, así como también la ola de incendios, el desabasto de agua, el deshielo de glaciares y los cambios de temperatura como resultado del calentamiento global, contaminación y uso exagerado de combustibles fósiles”, detalló.