Vivimos de esfuerzos individuales
, asegura la seleccionada olímpica en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.
Mientras el sistema deportivo mexicano se mantenga obsoleto y la lucha de egos entre las autoridades no se detenga, será imposible que la natación salga del bache en el que se encuentra desde hace décadas. Liliana Ibáñez, una de las más experimentadas en la disciplina, levantó la voz ante la profunda crisis que prevalece en el país.
Vivimos de garbanzos de a libra, de personas que sobresalen con esfuerzos individuales. Existe más talento del que pensamos, pero hay muchos deportistas que se quedaron en el camino porque no tuvieron el empuje necesario. En México no hay un sistema de detección de talentos a temprana edad y en la natación si quieres destacar debes comenzar joven. El trabajo debe iniciar en las escuelas porque son la base de la pirámide
, analizó la seleccionada olímpica en los Juegos de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.
Acercarse al nivel de las potencias es un trabajo que no se logrará de la noche a la mañana, pues se requieren años para bajarle segundos al reloj.
Es un gran logro para un mexicano llegar a la semifinal en unos Juegos Olímpicos o Mundial, es lo que tenemos, porque no hay un sistema en el que se diga que estos deportistas están para una final.
Tras estudiar la carrera de planeación prbana y una maestría en la Universidad de Texas, la guanajuatense opinó sobre la diferencia entre la preparación de los nadadores estadunidenses y mexicanos.
El sistema de la NCAA es muy exitoso en Estados Unidos, trabajan muy bien de la mano de la iniciativa privada y fácilmente podrían tener dos representantes en finales olímpicas pero por regla no se permite. En México está en Conadeip, sin embargo, su nivel está muy alejado del estadunidense. Necesitamos un sistema educativo-deportivo urgente.
Sobre los conflictos entre la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte y el Comité Olímpico Mexicano, así como problemas legales de la Federación Mexicana de Natación, Ibáñez sostiene que se trata de una lucha de egos.
Es un tema que se debe desenmarañar, hay muchos intereses en juego. Todos buscan su beneficio y no el de los atletas, aquí no existen víctimas, todos tienen la culpa y los afectados son los deportistas. Mientras no se bajen los egos no se resolverá nada.
–¿Qué esperas del nuevo titular de la Conade?
–Que llegue con la meta de favorecer a quienes competimos por el país. En lo que se refiere a los deportes acuáticos no todo es clavados; la federación también engloba el polo, la natación artística y la natación. Todos quieren el control de las disciplinas más ganadoras, pero también existen otras. El nuevo director debe colocar encargados en cada una de ellas para llevar un control y que puedan destacar también.
Aunque lleva más de dos décadas como seleccionada nacional, Liliana Ibáñez aún no piensa en el retiro.
Voy a prepararme para los que serán mis quintos Juegos Centro-americanos. Lo más importante para mí es la continuidad, seguir nadando, porque paré mucho tiempo por lesiones
, dijo la máxima medallista mexicana en Barranquilla 2018.
Gracias a su carrera, Liliana puede costearse su preparación y entrenamientos ya que no recibe becas gubernamentales.
Soy la encargada a nivel Latinoamérica de una marca de trajes de baño. Tenemos como embajadores al campeón olímpico de 50 metros y al de 800. Desde que inicié en el alto rendimiento supe que tenía que estudiar por si alguna vez me lastimaba o tenía que costear alguna competencia. Yo me encargo de mis gastos y mi estado me apoya a pagar algún viaje internacional que va de los 200 a los 300 mil pesos
, detalló.
Para la medallista regional es necesario aprovechar lo espectacular de su deporte para acercar a más niños a su práctica.
La natación es uno de los deportes que la gente más ve y eso debe usarse para que los niños se acerquen a ella. Es una disciplina que salva vidas y que puedes practicar desde que naces hasta los 99 años
, enfatizó Liliana.
Fuente: La Jornada
Foto: La Jornada