Nueva York. Estados Unidos, Francia, la Unión Europea y varios países árabes pidieron un alto el fuego inmediato de 21 días
en Líbano, donde los ataques entre Israel y Hezbollah amenazan con envolver a Medio Oriente en una guerra total, el mayor temor manifestado por la comunidad internacional en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Pedimos un alto el fuego inmediato de 21 días en la frontera entre Líbano e Israel para dar una oportunidad a la diplomacia y alcanzar una solución diplomática
a la situación en Líbano y Gaza, señala una declaración conjunta divulgada anoche por la Casa Blanca. Es hora de alcanzar un acuerdo diplomático que permita a los civiles de ambos lados de la frontera regresar a casa sanos y salvos
, señala.
El secretario de Estado, Antony Blinken, y otros funcionarios han pasado los últimos tres días en la Asamblea de la ONU y al margen de la reunión anual de líderes mundiales en Nueva York presionando a otros países para que apoyen el plan, que esperan pueda conducir a una estabilidad más duradera a lo largo de la frontera, según las fuentes, que hablaron bajo condición de anonimato.
Se desató un infierno
Hemos estado trabajando con nuestro socio estadunidense en una plataforma para un alto el fuego temporal que permita el desarrollo de las negociaciones
, aseguró el canciller francés, Jean-Noël Barrot, en Nueva York. Poco antes, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a un cese de hostilidades inmediato en Líbano, donde se está desatando un infierno
.
Agradecemos a todos los que están haciendo un esfuerzo sincero con la diplomacia para evitar la escalada y una guerra total
, declaró a la prensa el enviado de Israel para Naciones Unidas, Danny Danon, antes de entrar en la sesión.
Pero zanjó: utilizaremos todos los medios a nuestro alcance, de acuerdo con el derecho internacional, para lograr nuestros objetivos
.
En el contexto de la Asamblea General de la ONU, el canciller chino, Wang Yi, se reunió con el presidente iraní, Masud Pezeshkian, a quien dio su apoyo ante el aumento de la violencia en la región y los crecientes ataques de Tel Aviv contra posiciones de Hezbollah, respaldado por Irán, en el sur de Líbano.
El líder supremo iraní, el ayatola Ali Jamenei, sostuvo que la reciente muerte en Líbano de varios altos mandos de Hezbollah no logrará poner de rodillas
al movimiento islamita aliado de Teherán.
Fuente: La Jornada
Foto: La Jornada